Después de una noche salvaje, necesitaba dinero. Mi vecino atrajo a dos bellezas por encima. Negras, asiáticas y colombianas, formaron un trío kinky. Miré cómo se daban placer entre ellas, culminando en un caliente final de creampie.
Estaba en Medellín, Colombia, cuando llego a un trato con mi vecino.Tenía una esposa asiática ardiente y un culo gordo y apretado.Le ofrecí dinero para compartirla conmigo.Él era un juego, y preparamos un trío.La vista de su cuerpo aceitado y su culo apretado me tenían duro de inmediato.Nos turnamos para follarla, ambos a pelo, mientras ella gemía en éxtasis.Me encantaba verla ser follada por la gran polla negra de mi vecina.Incluso llegué a terminar dentro de ella, llenándola de mi semen.Fue un viaje salvaje, y la vista de cómo me follan dos pollas fue un espectáculo para contemplar.Una verdadera experiencia de trío colombiano.
